Rumbo al MIR

Cuando piensas en el día del examen MIR se cruzan multitud de dudas por la mente. Además de si habrás estudiado lo suficiente, de si serás capaz de aguantar al máximo sin ir al baño para no perder ni un segundo, de si vas ese día directamente a la ciudad donde está tu sede (que en mi caso estaba a unos 120 Km) o irte la noche antes y dormir en un hotel; a mí también me preocupaba mi problema de espasticidad, puesto que mi hemiparesia es espástica y en momentos de nervios o con el frío que suele hacer en la fecha de la prueba y sobre todo en Granada que es donde la hice, este problema se acentúa. Por ello me planteé solicitar una adaptación para el examen, por ejemplo, un poco más de tiempo para poder levantarme o estirar los músculos de mi hemicuerpo izquierdo, porque en esas situaciones puede llegar a ser muy dolorosa la espasticidad. Pero ya había hecho muchos simulacros sin necesidad de hacer nada especial y había entrenado una técnica, así que decidí no pedir nada y hacer el examen en las mismas condiciones que los demás.

Dos semanas antes del examen, la academia donde hice la formación nos daba la posibilidad de hacer el “penúltimo” simulacro (el MIR siempre sería nuestro “último simulacro donde teníamos que dar lo mejor de nosotros y un poco más”) en la sede donde una semana más tarde nos examinaríamos oficialmente junto con el resto de aspirantes. Yo decidí no ir por la distancia del viaje y el frío que estaba haciendo esos días. Pero sí rondaba por mi cabeza como sería la Facultad de Derecho de Granada. Solo sabía que era un edificio antiguo y me preocupaba que no estuviera adaptado arquitectónicamente, por lo general soy una persona totalmente autónoma, antes vivía en un segundo sin ascensor y las aulas de mi facultad son tipo anfiteatro, pero en ese momentos los nervios te hacen plantearte mil cosas, así que le pedí a los compañeros que sí fueron a ese simulacro y a mi tutor de la academia que me contaran como era esa facultad y el aula donde me tocaba hacer el examen. Como era lógico esa facultad estaba adaptada y no tuve ningún problema el día del examen, pero siempre se tiene algo de miedo ante lo desconocido y más en estas situaciones.

Facultad de Derecho de Granada

 

Después de contaros mi caso como ejemplo de las dudas concretas que pueden surgirle a una persona con discapacidad voy a hablaros sobre cómo están reguladas las adaptaciones para el día del examen y qué debemos tener en cuenta al realizar la solicitud.

Para comenzar aquí os dejo la legislación a tener en cuenta:

-          La correspondiente Orden de la convocatoria del examen. En mi caso fue la Orden SSI/1892/2015, de 10 de septiembre; y la del próximo examen es la Orden SSI/1461/2016, de 6 de septiembre. Donde se indica el procedimiento de solicitud de adaptaciones (Apartado 3 de la base IV en ambos casos).

-          ORDEN PRE/1822/2006,  de  9 de  junio,  por la  que  se  establecen  criterios generales  para  la adaptación de tiempos adicionales en los procesos  selectivos para  el  acceso al  empleo público de personas condiscapacidades.

Lo primero a tener en cuenta cuando hagamos la solicitud es que por tener reconocido un grado de discapacidad igual o superior al 33% no tendremos que pagar las tasas del examen. Además podremos marcar la casilla para participar por el turno de personas condiscapacidad, aunque esto es opcional. Si la marcamos, una vez realizado el examen tendremos dos números de orden, el de turno ordinario y el de turno de personas con discapacidad. En otra entrada hablaremos con más detalle de qué es y cómo funciona el turno de aspirantes con discapacidad.

Respecto a las adaptaciones para el día del examen, estas deben solicitarse en el momento en que entregas tu solicitud de examen y siendo requisito que participes por el turno de personas con discapacidad. Por tanto, para poder solicitar cualquier adaptación, se debe tener reconocido un grado de discapacidad igual o superior al 33% o tener la consideración de pensionista por incapacidad permanente en los términos previstos en el artículo 4 del Real Decreto Legislativo 1/2013, de 29 denoviembre (Apartado 7 de la Base II de las convocatorias). Para solicitar las adaptaciones necesarias se debe adjuntar un escrito detallando las adaptaciones que se solicitan y los motivos que la justifican, además de aportar la documentación y certificados pertinentes. La  Dirección  General  de  Ordenación  Profesional,  del  Ministerio  de  Sanidad,  Servicios  Sociales  e  Igualdad, será la encargada de validar o no dichas adaptaciones.

¿Qué adaptaciones se pueden solicitar? Existen adaptaciones, ajustes complementarios razonables y ampliaciones de tiempo. Mientras que las ampliaciones de tiempo están reguladas por la ORDEN  PRE/1822/2006,  de  9  de  junio; lo cierto es que no existe una guía o listado de adaptaciones y ajustes complementarios, por lo que toca investigar.

Al llamar al Ministerio de Sanidad para informarnos nos indican que es el propio aspirante quien debe saber qué adaptaciones necesita. Por tanto, cada aspirante puede solicitar todo lo que considere necesario para garantizar que se cumple el derecho de igualdad, aunque la solicitud nunca supone la concesión automática. Ya que no existe una “guía oficial”, como fuentes de información podemos recurrir, por ejemplo, a asociaciones que ofrezcan asesoramiento de este tipo o a los servicios de atención al alumnado con discapacidad de las diferentes universidades. Además, aunque no sean “oficiales”, existen guías que pueden ser útiles como por ejemplo la Guía de adaptaciones yrecursos para estudiantes con discapacidad de la UNED o guías universitarias para otras pruebas. Por último, os dejo la página de la Universidad del País Vasco, donde se enumeran las adaptaciones para los diferentes tipos dediscapacidad en las pruebas de acceso.

Y hasta aquí la entrada de hoy, que espero que os sea de ayuda. Si a alguien le surgen las mismas dudas que me surgieron a mi acerca del lugar del examen y no tenéis la oportunidad de ir a ver en persona como es el edificio, mi consejo es que llaméis y preguntéis todas las dudas que tengáis, pero siendo la sede generalmente un edificio público no debería tener barreras arquitectónicas.

Para despedirme solo me queda desearle suerte a todos los compañeros y compañeras que en 11 días tienen ese examen tan temido, pero solo tenéis que pensar que es un simulacro más, para el que lleváis meses estudiando, que estáis preparados más que de sobra y es en el  que más netas vais a sacar, así que solo os queda dejar los nervios fuera del aula el día 28 y que deis lo mejor de vosotros mismos, la recompensa esta cerca. Mucha suerte y que la fuerza os acompañe.